Todo está conectado
Ajá. Aunque pongas cara de "¿qué onda con esta loca?", "primera y última, mejor le doy unfollow", no te vayas todavía permíteme explicarte; Si, sabemos que todo está conectado: nosotros, el cosmos, Dios, las energías, lo que comemos con lo que termina en el baño, tu y tu pareja, ¿pero, realmente entendemos todo ésto? Yo creo que no y tal vez nos estemos alejando cada vez más de poder entenderlo, por eso el calentamiento global, la alimentación industrializada, las enfermedades mortales latentes en cada uno de nosotros y mil cosas más.
Quisiera hablarte de este tema pues es algo de lo mucho que he aprendido en mi proceso de perder peso. Todo está conectado y es una verdad que no deberíamos ignorar.
Nuestras emociones afectan a nuestro cuerpo porque simplemente no pueden sentirse fuera de él y éstas, si son malas, perjudican en gran manera el correcto funcionamiento de nuestro UNICO cuerpo para esta vida.
Nuestros alimentos, al ser el combustible que le damos al cuerpo para que arranque, afectan de sobremanera la manera en la que éste trabaja. Si recibe combustible de mala calidad no esperaremos un funcionamiento óptimo. Suena lógico ¿verdad?.
Nuestros pensamientos crean nuestra realidad, si son buenos te van abriendo camino y van apareciendo oportunidades donde nunca creíste encontrar y si son malos simplemente no vas a encontrar oportunidad - de crecer, de sanar, de adelgazar, de perdonar y la lista puede ser infinita-, porque generalmente ni siquiera lo intentas, "¿para qué?, de todas maneras ya sé que me van a decir que no", "mejor ni voy al gimnasio, con toda esta gordura a los tres días me voy a cansar y voy a dejar de ir, como siempre", lo alarmante es que estos son los pensamientos que moldean nuestra realidad y nos van permitiendo avanzar o estancarnos más.
Nuestro entorno es donde nos desarrollamos como personas y debemos parar antena para analizar si realmente está ayudando a lograr nuestros metas de vida o de lo contrario, nos está frenando. Éste puede generar gran cantidad de estrés -que se verá reflejado eventualmente en el funcionamiento de tu cuerpo- ya sea debido a presión social, a tu trabajo, a tu familia, a amigos, a vicios o a mil factores más . Si tu entorno es tóxico tus pensamientos van a ser tóxicos y éstos van a generar emociones tóxicas que te harán consumir comida tóxica y a final de cuentas llevar una vida tóxica y llena de estrés. ¡Aguas! es un círculo vicioso.
Y así el mundo gira con personas rebosantes de estrés que no hemos entendido esta conexión que hay entre todo. Personas que comemos lo que nos encontremos y que damos a nuestro cuerpo por sentado. Personas que omitimos nuestros sentimientos y necesidades personales para cumplir con las metas del trabajo. Personas que queremos un cuerpo irreal de revista photoshopeada y no lo queremos mañana, si pudiera ser hoy, mejor. ¡Ah! y con el mínimo esfuerzo y para llevar. Personas que no sabemos ni escuchar al cuerpo en el que vivimos para entender su necesidades y afecciones. Ahora dime, si no podemos conectarnos siquiera con ésto ¡¿cómo carajos se supone que vamos a conectar con lo demás?! Me gustaría que entendiéramos que todo lo que se sentimos, pensamos, comemos y hacemos está conectado con nuestro cuerpo e inconscientemente todo esto dicta las pautas a seguir para nuestra vida lo que termina afectando el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Al estrés de no estar en balance con tu propio cuerpo súmale los químicos aditivos que contiene TODA la comida industrializada que hoy consumimos, las hormonas a las que nuestro cuerpo no está acostumbrado que se usan para engordar a las aves, los antibióticos que usan para el ganado que terminamos consumiendo, el veneno más letal que conocemos como azúcar (que por igual podría tomarse al jarabe de maíz como endulzante), los alimentos genéticamente modificados (que obvio tienen todo que ver con las enfermedades relacionadas a mutaciones genéticas hoy en día), los aditivos ADICTIVOS que nos hacen consumir comida basura sin control y sin consciencia, los conservadores que pueden hacer durar la "comida" hasta 22 años en los anaqueles -ajá, imagínate lo que eso puede hacerle a tu cuerpo-, los lácteos -que nuestro cuerpo simplemente perdió la capacidad de digerir en el momento en el que nos salieron dientes-, el cada vez mas escaso consumo de alimentos vivos (o verdes para relacionarlos más rápidamente), el consumo desmedido de carne roja (me declaro súper culpable, nací Sonorense), los fertilizantes en nuestros alimentos, los gobiernos corruptos que dejan que se nos venda cualquier cosa para comer así sea veneno puro (que lo hacen) a cambio unos buenos pesos (o dólares a quienes bien les va). Imagina metiendo todo eso en tu cuerpo tres veces al día todos los días de tu vida y quisiera saber cómo se verían nuestros órganos en unos cuantos añitos debido a toda la porquería que consumimos, con todo lo que nuestro cuerpo NO pudo digerir (porque son químicos con los que no está relacionado) y que se quedó estancada en nuestro organismo por años o décadas envenenándonos de a poco y causando todas y cada una de las enfermedades con las que hoy peleamos a diario y se llevan a nuestros seres mas queridos. En el mundo en el que vivimos desgraciadamente todo es negocio y las empresas no se tocan el corazón para vender veneno a pesar de estar comprobado científicamente que "x" aditivo en los alimentos procesados es cancerígeno, ellos siguen ganando y nosotros nos seguimos enfermando. No quiero de ninguna manera volverte vegano, yo no lo soy, pero quisiera crear conciencia de que lo que comemos nos sana o nos enferma y a mi me ha funcionado bastante bien tener toda esta información a la mano para tomar decisiones cada que voy a consumir alimentos, a estar mas alerta de lo que voy a ingerir y si realmente quiero comerlo, por todo lo que ello implicaría. Al final de cuentas, todo está conectado; la salud con la enfermedad en el más importante de los casos y es cuestión de pequeñas y conscientes decisiones para las cuales nos podemos ir entrenando con un poco de disciplina y voluntad. Déjame mantenerte informado para que puedas tomar tus propias decisiones y adoptes las ideologías, conceptos o teorías -con información en mano- que mejor se adapten a tu estilo de vida y te ayuden a tomar decisiones saludables. ¡Nos seguimos leyendo! Gracias, C.
"Cerrar los ojos ante el problema no lo hará desaparecer" - Rory Freedman & Kim Barnouin